22.1.05

Examina tus conocimientos con Budigrama

BudiGrama una manera divertida de revisar tus conocimientos basicos de Budismo

El Buda dentro de nosotros mismos

Por: Maria Immacolata Macioti, profesora de Sociología de Religión. Universidad de Roma La Sapienza, Italia.
Tomado del Seikyo Criollo, Noviembre 1997

Fue en 1991 que comencé a tomar un mayor interés en el movimiento italiano de la Soka Gakkai, aunque lo había conocido hace algún tiempo. Había leído varias cosas acerca de la organización y escuchado hablar de ella por colegas en conferencias internacionales en donde se reúnen periódicamente profesores e investigadores interesados en la religión. Sin embargo, fue en 1991 que comencé a tener un contacto directo con la SGI y empecé a contemplar la posibilidad de una investigación involucrándome con la organización que, como ocurre frecuentemente, ha pasado por diversas fases.

Por más de un año, dos jóvenes colaboradoras, Laura Ferrarott, Enrica Tedeschi y yo asistimos a esas reuniones que son fundamentales para la práctica de los miembros de la SGI, siendo nuestra posición la de "observadoras participantes". Con el permiso de los lideres y miembros siempre grabábamos el diálogo en las reuniones para no olvidar o tergiversar lo que se decía. Quería que nuestro papel, así como nuestro interés científico, fueran claros en todo momento, y estoy convencida de la importancia de utilizar una metodología éticamente correcta para esto.

Una vez que nos dimos cuenta de la magnitud del movimiento en Italia, decidimos utilizar una encuesta para complementar nuestro estudio cualitativo que estaba basado en la observación,
entrevistas y la acumulación de experiencias. La encuesta fue cuidadosamente revisada y recopilada y luego enviada a grupos individuales a través de una distribución interna. Cerca de
4,000 encuestas completadas fueron devueltas. Se escogió una muestra representativa y los resultados fueron trabajados con un grupo de estudiantes: una provechosa experiencia formativa para estudiantes de sociología. Luego se prepararon los papeles de investigación, basados en una observación más profunda de áreas especiíficas. Mientras tanto, mis dos
colaboradoras analizaron las dos revistas del movimiento, Duemilauno e Il Nuovo Rinascimento.


Todo este trabajo fue presentado en una conferencia sobre el Budismo en Mayo de 1994. No obstante, aún no estaba segura de que tenía un conocimiento completo del movimiento y su
realidad la cual, contraria a mis expectativas, se mostraba rica y compleja. Había escuchado que
las críticas a la Soka Gakkai la consideraban como una organización muy rígida y casi militarista.
También sabía que Nichiren y sus seguidores habían sido acusados de violencia así como de intolerancia y sectarismo. También había sentido que algunos miembros percibían el papel de los líderes como autoritario. Por consiguiente, quise profundizar mi conocimiento del movimiento,
mi contacto directo con él y participando tanto en las reuniones ordinarias como en las especiales.


Me parecía que la Soka Gakkai estaba pasando por un difícil período de transición en relación con su "divorcio" del clero, y yo quería entender cómo iba a cambiar. En consecuencia, continué
recopilando experiencias, visitando Florencia, Milán, Turín y el sur de Italia para participar en diversas reuniones. Luego de cinco años de estudio, creo que ahora entiendo por qué este
movimiento interesa y atrae a tantas personas de todas las edades. Creo entender por qué las personas permanecen en la organización y se entregan a la participación de sus muchas
actividades así como el por qué algunos no se quedan. La falta de presión para unirse y la libertad para abandonar el grupo me parece, no obstante, muy importante, y es bueno que estos dos aspectos coexistan.


Una de las razones de que las personas se sientan atraídas hacia este movimiento es su potencial
para transformar la negatividad que con frecuencia es inevitable en la vida. Todas las experiencias de vida de muchas de las personas con las que hablé, cuyas palabras y sufrimiento grabé, revelan un pasado difícil. Esas palabras aún conservan el sonido de la angustia: se puede escucharla hasta casi tocarla. Ellos recuerdan cómo el encuentro con alguien que practicaba,
y luego con el Gojonzon, les dio un propósito en la vida, les dio esperanzas. Gradualmente redescubrieron su interés en la vida. Muchos miembros dicen que las enseñanzas de Nichiren,
tal como eran explicadas en las orientaciones de Daisaku Ikeda, así como en las de los líderes italianos, constituyeron para ellos un punto decisivo, redirigiendo sus deseos y expectativas.


Otra razón para el fuerte interés de las personas en la ISG (Soka Gakkai de Italia) se relaciona con el concepto de “acción útil” en el mundo. Parece que muchos miembros fueron atraídos a
la ISG debido a esto. El dolor es aparentemente transformado en medicina. Las dificultades parecen asumir un aspecto diferente cuando son reconsideradas bajo la luz del concepto del karma. Aquí, la ley del karma no es considerada como destructiva, o como una excusa para la incapacidad o el fracaso Más bien, es utilizada para ofrecer posibles explicaciones, interpretaciones racionales y una dirección para el futuro: es aquí y ahora. Se enseña que uno cosecha el fruto de las semillas sembradas en el pasado y que se siembran las semillas para el mañana.


Bajo esta luz, la fe, práctica y estudio no son más palabras abstractas o aspiraciones distantes. En vez de eso, se convierten en hechos reales, oportunidades, estímulos constantes y depende del individuo el obtenerlos. Las personas pueden tener la impresión de que el camino de vida ofrecido como ejemplo por la Soka Gakkai es algo exigente, en términos tanto de tiempo como de voluntad para cambiar. No sorprende, por lo tanto, que no todos se sientan dispuestos a ello. Sin embargo, entiendo el fuerte vínculo que une a aquellos que se mantienen, quienes intentan trabajar juntos para ellos mismos y para los demás. Entonces, ¿está la organización libre de
problemas? ¿Es todo “suave travesía” una vez que una persona ha decidido embarcarse en la jornada de la fe? No lo creo. Así como es exigente cualquier compromiso personal, el compromiso
con el movimiento de la SGI italiana parece haber tenido, y aún tiene, problemas.


Me parece que existen algunas dificultades en la relación entre los miembros y los líderes en la
adaptación y orientación de la mentalidad italiana hacia diferentes sugerencias culturales. El movimiento se encuentra constantemente en la lucha por alcanzar y mantener el equilibrio, de hallar un balance entre la tendencia de institucionalizar y organizar (formar grupos, cabildos
centrales, territorios, etc.) y fomentar la espontaneidad (formar redes y grupos que son creados por intereses comunes). Para muchos, la Soka Gakkai ha significado experiencias positivas, posiciones establecidas, incentivos; la posibilidad de encontrar respuestas a las exigencias
de cambio y a la necesidad de sentido. Para muchos, ha sido el principio del camino hacia la felicidad, una fuente de fortaleza. Ha inspirado y ofrece seguridad.


Se debe esperar que estos aspectos puedan, con el tiempo, profundizar más sus raíces, ganen reconocimiento y tengan oportunidades para desarrollarse. Esto, por supuesto, depende del
tipo de reconocimiento, del tipo de bienvenida y encuentro que la sociedad italiana y el más amplio contexto europeo ofrezcan con respecto a la Soka Gakkai. Para mi, el encuentro con este complejo fenómeno ha sido una positiva y enriquecedora experiencia.

En cuanto a la Perseverancia

Por Leigh Kennicot corresponsal de Los Ángeles
Tomado del Seikyo Criollo, Junio 1977

“Mientras la práctica progresa y el entendimiento crece, emergen los tres obstáculos y los cuatro demonios, rivalizando unos con otros para interferir. No debes dejarte influenciar por ellos, ni permitir que te atemoricen”. Esta cita no sólo se aplica a Nichiren sino que es la guía para sus discípulos. (Escritos Principales de Nichiren Daishonin, vol. 1, pág. 145).


Esperen un segundo... ¿No se supone que éste sea un artículo sobre la perseverancia? ¿Por qué estamos hablando de obstáculos? Bueno, quizás la perseverancia se puede comprender mejor si examinamos aquello a través de lo que se supone que perseveremos. Por ejemplo, si en algo te pareces a mí, la interferencia con tu práctica es difícil de identificar. ¿Qué hacer ante la duda, simple y sencilla?. Es aquí donde entra el concepto de romper barreras.

En nuestra cultura, la “perseverancia” ha adquirido mala fama. Tenemos la tendencia a considerarla como algo fastidioso o monótono; algo así como avanzar por un lago de melaza hacia una meta inimaginable y distante hasta que, después de un largo, aturdido y desagradable espacio de tiempo, la meta es alcanzada. La perseverancia se ve como un mal necesario, una parte de la vida de la cual todos deseamos prescindir. Por otra parte, en el Budismo de Nichiren
Daishonin, la perseverancia contra la duda asume las cualidades de valentía, vigor e ichinen de cara a lo desconocido- “saltar en la boca del demonio”.


Para los seguidores del Daishonin, la perseverancia es uno de los seis paramitas que, al entonar Nam Miojo Rengue Kio, podemos manifestar sin tener que practicarlos como austeridad.
Pero, ¿cómo es esto? En su charla sobre “El Verdadero Objeto de Devoción”, el presidente Ikeda explica: “Francamente, pienso que podemos decir que (los seis paramitas) representan los atributos que hacen que los seres humanos sean realmente “humanos”. También sirven de guía segura a nuestro movimiento hacia la Revolución Humana, hacia la reforma y hacia la concertación de un yo individual”. (Selección de explicaciones sobre el Gosho, vol. 1, 226).


La perseverancia es el tercero de los paramitas. El presidente Ikeda describe la dificultad de esto a través del ejemplo de Shariputra, que pasó sesenta eones practicando el sendero del
Bodisatva hasta que, en la víspera de alcanzar la Iluminación, se topó con un braman que le pidió un ojo como limosna. Shariputra generosamente se sacó el ojo y se lo dio al braman, quien
inmediatamente lo pisó. Con indignación justificada, Shariputra abandonó su búsqueda. Retrocedió nuevamente a los comienzos de su práctica, sesenta eones hacia atrás. Perseverar con este contexto exige una expresión de fe. Cuando aparentemente existen razones perfectamente justificadas para descontinuar, sólo la fe nos permite persistir hasta el punto en el cual experimentamos la prueba real que nos garantiza a todos Nichiren Daishonin.


En un reciente discurso el presidente Ikeda menciona este punto: Ocurren muchas cosas en la vida. Hay tristeza, hay sufrimiento. Cada día hay cosas que no nos gustan o que nos molestan. Puede que las parejas tengan sus peleas. Podría haber un divorcio y miseria después.
Aun así la pareja se lleva bien, quizás los hijos sufran de alguna enfermedad, o ellos mismos quizás se enfermen. Hay todo tipo de sufrimientos y problemas. ¡Así de tremendos son los retos de la vida!. La fe es el “motor” que nos permite perseverar en nuestras vidas hasta el mismísimo final. (World Tribune, 21 de feb. De 1994, pág. 4).


El ejemplo de Shariputra también nos señala el factor tiempo. Aunque la perseverancia implica continuar, hubo un momento crucial en el cual Shariputra tomó una decisión fatal. Confrontar la
propia duda no tiene que ser una batalla continua: de hecho, solamente se convierte en un problema persistente si no se le presta atención. Al describir este fenómeno, Josei Toda, segundo presidente de la Soka Gakkai, dijo en una ocasión: Existen cuatro demonios: la
obstrucción de la enfermedad, la obstrucción de la muerte, obstrucciones que surgen de los venenos y la obstrucción del Demonio del Sexto Cielo. Fuerzas maléficas que nos hacen dudar se levantan contra nosotros en un esfuerzo por debilitar nuestra fe. ¡Ataquen si se atreven! ¡No me dejaré derrotar por ninguna de las fuerzas maléficas! Cuando confrontamos las fuerzas maléficas así de resueltamente, inmediatamente se dispersarán. (World Tribune, pág. 5, 27 de junio de 1994).


Aquí la perseverancia requiere la valentía de confrontar lo desconocido y de romper una barrera. Es por eso que Nichiren Daishonin afirma en el Gosho titulado “La Dificultad de mantener la Fe”: “Muchos oyen sobre este Sutra y lo aceptan, pero pocos continúan su
fe de cara a grandes obstáculos. Aceptar es fácil; continuar es difícil. Pero la Budeidad yace en la fe continua”. (MW-1, 127).


La idea de una práctica indoblegable de por sí podría parecer atemorizante. ¿Cómo podemos interpretar este aspecto de la búsqueda de la Iluminación y hacer que sea algo emocionante y alegre? En la Primera Reunión General de la Soka Gakkai de Tailandia, el presidente Ikeda dijo:
Por tanto, una persona de fe jamás es derrotada por ninguna tormenta de obstáculos que pueda confrontar. La vida de Nichiren Daishonin fue una vida de persecuciones continuas, todas las cuales él resistió en pro de la felicidad de la humanidad. En particular, la persecución de Tatsunomokuchi en 1271 fue la prueba más grande que experimentó en su vida; sin embargo, el Daishonin se mantuvo imperturbable ante los eventos que se desarrollaban en torno a él.


A la vez que se acercaba el momento de su ejecución, el Daishonin le dijo a su fiel seguidor Shijo
Kingo, quien lloraba por la tristeza que le causaba el destino de su mentor. ‘Te deberías alegrar de esta gran fortuna (o sea, la mía, la de ser sentenciado a ser decapitado por el Sutra del Loto)’ (MW- 1, 181).


Poseer una convicción inquebrantable de cara a cualquier dificultad es saborear un estado mental tan majestuoso como el fluir del Río Chao Praya de Tailandia. La fe nos permite alcanzar un estado mental como ese”. (Pág. 4). Otra palabra para “estado mental” podría ser ichinen, lo que entendemos como determinación, o la energía de un instante de vida. Como lo explica
el presidente Ikeda: En el análisis final, la vida no es nada más que nuestro Ichinen, o la vida que se manifiesta a cada instante. Debido a esto, podemos determinar libremente nuestro futuro a través de un cambio en nuestra mente de fe. Podemos expandir nuestra condición de vida
infinitamente, siempre en ascenso y explorando la realidad de la vida sin límites. Es ahí que yace la suprema, alegría y significado de nuestra práctica y es la quinta esencia de la vida a la Ley Mística. (Budismo en Acción, vol. VI, págs. 57- 58).


La noción del ichinen, al gusto por los retos y el momento relámpago de decisión: todos son aspectos de la perseverancia que la sacan del reino de la experiencia monótona y obstinada
y hacen de ella la receta para una existencia refrescante. Es el arma secreta del Éxito. De nuevo, en Tailandia, el presidente Ikeda explicó que ‘la persistencia es poder’: “En la fe, la persistencia es lo que cuenta. El gran autor tailandés Luang Vichitvatakarn (1889-1982), que produjo muchas obras célebres, escribió: ‘La persistencia continua construye un gran poder’.


Este principio se aplica ampliamente. Es con la creencia de que ‘la persistencia es poder’ que
yo lucho para desarrollar aún más el intercambio cultural entre Tailandia y Japón.”(Pág. 4).
Cuando captamos que la perseverancia tiene el poder de transformar nuestras vidas, se arroja una nueva luz sobre el concepto: en vez de conducirnos por un páramo sin caminos, plagado
de pruebas y tribulaciones, la perseverancia nos fortalece para escalar esas montañas de obstáculos y hace que la vista, desde la cima sea un paisaje de optimismo y alegría. ¡Que aparezcan más montañas!.

El espíritu buscador: cómo cultivarlo

Por Ross Dreiblatt corresponsal de Los Angeles
Tomado de Seikyo Criollo. Mayo 1997

A través de la vida de Sakyamuni podemos ver claramente que la búsqueda es fundamental al Budismo. Para comprender el misterio y la belleza de la vida debemos buscarlos. Como nos
lo recuerda constantemente el presidente Ikeda, todo gran filósofo, artista o persona humanitaria se ha hecho una pregunta y después ha buscado una respuesta. La clave de la grandeza, la clave de elevar la sociedad, yace en el deseo del individuo de encontrar respuestas.
“Descartar lo superficial y buscar lo profundo requiere valentía”. (Principales Escritos de Nichiren Daishonin, MW3- 125)

Cuántos de nosotros comenzamos a practicar Budismo después de escuchar el gancho de venta: “Entona Daimoku por lo que desees y lo conseguirás”. Y, para nuestra sorpresa a lo mejor obtuvimos “aquello” por lo que oramos. Sin embargo, tarde o temprano nos topamos con una tranca. Oramos aquí, allá y más allá, pero no podemos “alcanzar” aquello por lo que entonamos Daimoku. Nichiren Daishonin nos enseña que éste es el punto donde los valientes se preguntan por qué. Cuando comenzamos a comprender el funcionamiento de nuestra propia vida, a extraer la sabiduría desde nuestras vidas y comenzamos a tomar acción basada en esa sabiduría, podemos comenzar a asumir el control de nuestra vida.

¿Qué hacer cuando perdemos éste espíritu buscador? Esto puede ser un obstáculo muy sutil y poderoso en contra de nuestra iluminación. Muchas veces ni siquiera estamos conscientes de que está ocurriendo. Empezamos a sentirnos cómodos y hasta conformistas con nuestras vidas. Nuestra práctica se convierte en una formalidad. Dejamos de preguntarnos por qué. “El sentido de eternidad es un regalo de nuestra niñez. Las ansias por lo nuevo con seguridad nos hará sabios”. -Chinghiz Aitmatov, autor ruso y activista por la paz, en “Tiempo para aprender”.

Si somos afortunados, confrontaremos una tranca o un problema que nos obligará a reexaminar nuestras vidas. El presidente Ikeda nos ha estimulado a que usemos nuestros problemas como el combustible para nuestro crecimiento y nuestra Revolución Humana. Pero, si perdemos la esperanza, si aceptamos la derrota antes de comenzar ¿Qué podemos hacer?. Como cualquier problema, lo mejor es confrontarlo y admitir, que se tiene un problema. Admitir que nuestras vidas no son lo que queremos que sean. Reconocer que debido a que somos Bodisatvas de la Tierra y practicamos esta filosofía la vida tiene que ser mejor.

Entonces podemos comenzar a buscar y a encontrar las respuestas que probablemente han estado en nuestras narices todo el tiempo. “Encontraremos lo que busquemos y a lo que le huyamos, huirá de nosotros. Como somos, así actuamos y como actuamos, manifestamos lo
que sentimos. Somos los constructores de nuestras propias fortunas”. -Ralph Waldo Emerson, Padre del Renacimiento Norteamericano, autor y filósofo, tomado de “La Conducta de la vida” (1860).


Podemos superar una barrera y rejuvenecer nuestras vidas cuando refrescamos nuestro enfoque ante los elementos básicos de nuestra práctica. El estudiar tiene una importancia especial. Estudiar con la intención de encontrar una respuesta, no sólo para obtener
conocimiento sino para transformar ese conocimiento en sabiduría, nos ayuda a romper barreras. Comprender el método del buda nos permite ver nuestras vidas y preguntarnos cómo el buda lucharía con ese problema en particular.


Sin el estudio no tenemos idea de cuál es el método del buda y dependemos únicamente de nuestro propio razonamiento (que probablemente fue lo que inicialmente nos metió en problemas). Tan pronto comprendemos nuestras acciones, o sea, nuestro comportamiento
desde una perspectiva más profunda, podemos comenzar a dar los pasos para cambiar.
En esencia, todos los grandes avances, desde el descubrimiento de la rueda hasta la invención de la electricidad comienzan con una pregunta: ¿cómo?


Al buscar una respuesta, toda imposibilidad se convierte en realidad. A través de nuestra practica podemos obtener la valentía y la esperanza de hacer las preguntas importantes para nuestra vida. Entonces podemos encontrar las respuestas, corregir nuestros pensamientos
y triunfar. “El propósito de la vida es la felicidad. Si no eres feliz, has cometido algún error en el recorrido. Regresa, examina dónde está el error y corrígelo”. -León Tolstoy


Como escribe el presidente Ikeda en “La Revolución Humana”: “Si un hombre cree en algo que está errado, no importa lo que sea, esto lo arrastrará hasta las profundidades de la infelicidad...
La mayoría de las personas no se cuestionan ni siquiera si la sustancia de sus creencias es absolutamente correcta. Buena o mala, justa o dañina, la ignoran y siguen de lo más campantes
por el camino. Ahí, ahí mismo está la raíz de la infelicidad”.


Cuestionar esa infelicidad, rehusar aceptarla, buscar la solución dentro de uno mismo, es el principio de la Iluminación. “Una gran revolución en el carácter de una sola persona ayudará a
cambiar el destino de una nación y, aún más, efectuará un cambio en el destino de toda la humanidad”. - Josei Toda, “La Revolución Humana”